sábado, 4 de noviembre de 2006

Despedidas y otros momentos reciclables


Da media vuelta
si ves que no te llamo,
habita otro centímetro de mí
que desconozca
el miedo, la verdad o los cambios ocultos
de rasante, ven, acércate,
devuélvele tus huellas
a la tarde, inviérteme el sentido,
desnúdame
en silencio y con sólo rozarme,
igual que se desnudan
los otoños
al paso del recuerdo.
Aunque tropiece con tu ausencia
cuando abra los ojos
y hayamos cambiado de estación
y no sepa qué hacer
con el tiempo que aún queda.
Quizá intente envasarlo torpemente,
mordido en las esquinas,
en el tarro donde guardo
las mejores galletas...

45 comentarios:

eomyr dijo...

Preciosos versos, señorita Lágrima, me hace usted cosquillas en lugares de mi mente que tenía olvidados.
Con su permiso, me gustaría que me diera su opinión de experta sobre una rima que escribí hace tiempo:

Vuela la alondra, pausada,
Corre el caballo, veloz,
Y yo, que nací en Badajoz,
Ni vuelo, ni corro, ni nada.

Llusilanisa dijo...

Me gusta la idea de un momento reciclable.

Yo solo pude reciclar dos:

El primero fué una bonita tarde de sol que pude reaprovechar dos años mas tarde para adquirir un bonito tono cutaneo que, extrañamente, aun me acompaña.

El segundo fue mi falsa asistencia a la entrega del premio nóbel de física a Guillermo Marconi en 1909.

Extraños momento sin duda...

Maine dijo...

Preciosos versos. La foto que la acompaña me da a entender algo: hay palabras vacías que no dicen nada, y silencios que lo dicen todo. Me encanta recibir tu visita sin avisar, mi puerta siempre está abierta. Un beso.

Sansara dijo...

"devuélvele tus huellas a la tarde"...

Un gran poema, Lágrima. Un gran poema.

eika dijo...

Por favor necesito que me digas como guardar el tiempo, no conozco la receta.

Bellísio escrito, usted cada vez va hacia lo más sublime.

un beso encapsulado ;)

Leo Zelada dijo...

bien naif el texto.

Anónimo dijo...

¿Torpemente...? Permiteme que lo dude Lagrima, permiteme que lo dude...

¿Con que frecencia abres ese tarro? Conservalo siempre...

Anónimo dijo...

todo es reciclable, de todo puedo salir reforzado. Aunque se apaguen las luces, me quedarán tus ojos. Cuando tus ojos sean ausencia, me quedará tu recuerdo. Si tu recuerdo desaparece, tendré que inventarlo a base de material reciclado.

Angus Scrimm dijo...

Me ha gustado este poema, sobre todo lo del tarro de galletas. Siempre es bueno tener ese tarro bien lleno, para que cuando te entre algún antojo sepas a donde ir.

Un beso

Sandra Becerril dijo...

Auch... suele, duele bastante

manuel_h dijo...

ganas dan de no abrir los ojos y dejar que el otoño te envuelva así, por lo menos hasta sentir en la piel un calorcito nuevo, allá por el mes de abril.

besoss

Txe Peligro dijo...

odio las despedidas, menos esta

peter k dijo...

Sentado en la arena, esperando convertirme en uno de esos seres con pausa, voy a hacer un plan. Sí.
y voy a dar mil medias vueltas para volverme un poco más loco y poder gritar y gritar y volver a gritar centrímetros y cambios de rasantes desnudos en silencio. y con sólo rozarte cambiará la estación y podré volver a morderte las esquinas hasta llegar al centro de ti...

me pareció tan sútil tu texto!!
tanta delicadez!!

un besazo grande bonita

Lágrima del Guadiana dijo...

Muy agradecida, señor Groucho. Sus versos sí que me hacen cosquillas y dado que no hay nada más sano que una sincera carcajada, mi deber es pedirle que rescate Vd. sus cuadernos de poesía y tenga la amabilidad de compartirlos...

Prodíguese, Sr. Groucho, prodíguese.

Lágrima del Guadiana dijo...

Lo bueno de reciclar momentos es que no hace falta diversificar los contenedores: va todo al mismo saco (el mío con agujeros y remiendos). Haga la prueba, Ilusilanisa. Ah, y me tiene que contar Vd. cómo funciona eso de los bronceados con retardo y por qué no acudió a tan insigne evento. ¿Acaso no había nacido en 1909? Pequeños fallos logísticos, ¿verdad?

Lágrima del Guadiana dijo...

Muchas gracias, Maine.

Tienes razón: los silencios, como los cambios de estación, se hacen escuchar sin que nos demos cuenta...

Seguiré pasando sin hacer ruido, y si un día no estás, buscaré la llave debajo del felpudo.

Un abrazo

Lágrima del Guadiana dijo...

Muchas gracias, Sansara.
Te echaba de menos a este lado del otoño.

PD: por fin vi el sendero en tu imagen (22.10) pero sigo prefiriendo perderme entre los árboles.

Lágrima del Guadiana dijo...

¡Muchas gracias!

Soy una cocinera pésima, Eika, por eso presiento que mis intentos de almacenaje temporal acabarán en derrame... Intentaré al menos saborearlo: no conviene darse un atracón de galletas...

Me guardo esa capsulita en el kit de emergencia. Otra para ti, amiga, otra para ti...

Lágrima del Guadiana dijo...

Gracias, Leo. ¿Naif por alejado del academicismo? Ojalá pudiera añadirle unos cuantos toques más de ingenuidad al mundo que me rodea...

Un abrazo

Lágrima del Guadiana dijo...

Con demasiada frecuencia, querido teardrop. Aunque alguna vez recibo un manotazo cuando intento hurtarle demasiados momentos...

Un abrazo

Pamela Bram dijo...

a veces pedimos detalles que luego son olvidables... a veces aparecen, a veces seguimos esperando

Lágrima del Guadiana dijo...

Jesús: me ha gustado mucho tu planteamiento. Creo que necesitaba refuerzos...

Gracias por tu visita, tienes las puertas abiertas.

Saludos

Lágrima del Guadiana dijo...

Antojos tengo unos cuantos, Angus. Lo que pasa es que el tiempo es aún más caprichoso que nosotros...

Un abrazo

Lágrima del Guadiana dijo...

Vaya, Sandra, lo siento...¿Una galletita? Comparto... :-)

Besos

Lágrima del Guadiana dijo...

Ummmmmmmmm, ¡justo! Con abril hemos topado, el mes en el que aterricé en este mundo. Mira por dónde, he sentido ese calorcito en forma de cosquilleo anticipado...¡Gracias!

Un beso, Manuel

Lágrima del Guadiana dijo...

Gracias, txe...Quizá no odias esta despedida porque es una despedida sólo a medias, como quien deja la puerta entreabierta (o en mi caso el tarro destapado...) :-)

Lágrima del Guadiana dijo...

¿Y cuántas medias vueltas serán necesarias, Peter? Siempre me gustaron los giros, pero temo salir mareada y no poder mirarte sin temblar a los ojos... Aunque, bien pensado, hay vértigos (y roces) que justifican silencios voluntarios.

Besos de 180 grados...

Lágrima del Guadiana dijo...

...y a veces moldeamos esos detalles con cada curva, con cada bache, hasta hacerlos cambiar de forma, de instante...

Gracias por tu visita, Pamela

Maine dijo...

Me alegro de haberte dado paz, es todo un consuelo que mis palabras sirvan o alivien. Gracias por tu visita, un beso.

Peter dijo...

Frivolizando, que hay mucha tensión... de qué son las galletas? Seguro que se las rifan hasta los diabéticos, Lágrima!!

!D

Anónimo dijo...

Lágrima... hemos ganado un pequeño reto...

Otoño

búscate ;)
es todo un honor compartirlo contigo

Lágrima del Guadiana dijo...

Un toque de frivolidad nunca viene mal, Dan, y más viniendo de ti :-)

PD: mis galletas son aptas para todos los públicos (a veces...) ¿Quieres una?

Besos

Lágrima del Guadiana dijo...

Enhorabuena, Darco, cuánto me alegro. No dejes de retratar así los otoños...La imagen es una preciosidad. Y el honor de acompañarla ha sido mío. Gracias.

Un beso

Ernesto dijo...

El sorprendernos en una frase con actos típicos que podemos vivir, como "enfrascar torpemente".. que genial ese contraste.. me gustó mucho la ilación de ese sentimiento aún dedicado a alguien...

Lindo Lagrima...

Ernie.

Lágrima del Guadiana dijo...

Muchas gracias, Ernie. A veces no nos damos cuenta, pero la cotidianidad de los sentimientos los hace algo menos intangible, algo que podemos palpar, algo que casi podemos encontrar en cualquier parte...hasta en el interior de una alacena...

Un abrazo,

Luís Filipe C.T.Coutinho dijo...

te dejo un beso repartido por las palabras q dejaste en la hoja de papel de un dia más, un dia más lleno de ti y de todo lo q más sepan los minutos del tiempo...


besos

Lágrima del Guadiana dijo...

Muchas gracias, contador de historias . Ando perdida por esos minutos que se escapan del papel. Es una suerte que, de vez en cuando, pueda encontrarme entre líneas con palabras como las tuyas...

Muchos besos

ASKonigsberg dijo...

Bonitos versos, precioso poema...
Lo q duelen son las despedidas no reciclabes... no?

B!

Lágrima del Guadiana dijo...

Y tanto, askonigsberg...las despedidas no-reciclables son las peores...A no ser que uno tenga un corazón biodegradable... :-)

Besos

peter k dijo...

ayyyyyyyy, lágrimaaaaaa

Anónimo dijo...

Solo decirte, que me ha encantado!!
Volveré.
Besos.

Lágrima del Guadiana dijo...

Peter, ¿vas abriéndole camino a lo impredecible? Arranca minuteros y antifaces si es preciso.

Besos atemporales

Lágrima del Guadiana dijo...

Gracias por tu visita y por tus palabras, naranjacool.

Un abrazo

Anónimo dijo...

la caja de Pandora se ha abierto, escucho tus versos y noto que no solo que abrio sino que se a roto.

que lindo escribes. saludos

Lágrima del Guadiana dijo...

Muy acertado, Jorge, no sabes cuánto. No sé si podré reparar el cierre de esa caja algún día...

Encantada con tu visita, muchas gracias.